En nuestros caballos chilenos, y siguiendo el paso avisado de campesinos de la zona, de nuestro personal y guía bilingüe, la excursión se convierte en una experiencia muy agradable y sin complicaciones. Nos adaptamos a las habilidades de cada grupo, de modo que disfruten tanto las familias con niños como los jinetes experimentados.
Este circuito es 95% montaña. Esta fórmula le permite al viajero descubrir sitios escondidos y bosques nativos, inalcanzables en vehículo, desconocidos del mundo y de real belleza escénica.
El recorrido sigue caminos rurales y huellas de la Cordillera de la Costa, y fue pensado con el objetivo que uno siempre tenga los sentidos en vilo. Así atravesamos diferentes tipos de bosques, tanto densos como aireados, de caducifolios (Ruiles, Eucaliptos, etc), coníferas y variada vegetación arbustiva; cruzamos ríos, llegamos a planicies, donde se despeja una bella vista hasta el mar, para luego hundirse de nuevo en el bosque y cruzar encajonados ríos.
